La familia de vitaminas B incluye vitaminas B1, B2, B3, B5, B6, B12 más biotina y tal vez el nutriente más conocido del embarazo, el ácido fólico.
Aunque cada una de ellas tiene una función específica, básicamente trabajan juntas, por lo que es preciso que haya un buen equilibrio de las ocho.
Que hacen
Las vitaminas B crean nuevas células sanguíneas para el bebé en desarrollo y son fundamentalmente para el desarrollo del cerebro y la división celular, que es obviamente importante en los primero meses del embarazo.
La vitamina B6 es especialmente importante para el desarrollo del sistema nervioso del bebé, y juntamente con la B12 y con el ácido fólico, mantiene bajo el nivel de homocisteína y previene defectos de nacimiento como fisuras en el paladar y espina bífida.
Este trío, junto con el zinc, mantiene los niveles de homocisteína bajos también en la madre y trabajan con el resto de la familia de la vitamina B para producir energía. Además mantiene la piel y el cabello sanos y un equilibrio hormonal saludable (una deficiencia de B6, por ejemplo, es común en aquellas que padecen SPM).
¿Qué cantidad necesitamos?
Incluso aunque sigamos una dieta óptima, raramente obtendremos el equilibrio adecuado de cada una de las vitaminas B en las cantidades adecuadas. Pero las cantidades inluidas en un buen suplemento mineral y vitamínico deberían situarnos en el nivel apropiado. A modo indicativo, hay que tratar de suplementar las siguientes cantidades:
- 20-25 mg de B1 B2, B3 y B5
- 50 mg de B6, B12 y biotina
- 600 mg de ácido fólico
Suplementos: Debe elegir un suplemento que traiga todas las vitamianas B, o sea, un complejo B, porque juntas actúan sinérgicamente. También puede elegir un multivitamínico, ya que la B6, actúa mejor con zinc y todas trabajan con los minerales magnesio y manganeso.
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